A LA MEMORIA DE FRAY HERMINIO M. MANEA GRENDENE

Herminio (José Mario) Manea Grendene, nació el 31 de julio de 1928 en Isola Vicentina Vicenza, Italia. Hijo de Doménico y Teresa. Hizo su profesión solemne el 29 de junio de 1951, apenas ordenado sacerdote, el 4 de abril de 1953 sus superiores “le presentaron el crucifijo” que significaba ser enviado a la Misión de los Siervos de María, que ya en ese tiempo atendía en la ciudad de Aysén. Ese mismo año fue recibido en Chile por el superior, P. Tomás Sgualdino, quien le envía a Coyhaique junto a P. Victorino. En 1957, el Prior Provincial P. Clemente Francescón lo envió a Peñaflor para hacerse cargo de la casa de formación de seminaristas que deseaban seguir la espiritualidad de los Siervos.  Ahí conoció y formó a los primeros chilenos que llegaron al sacerdocio como Siervos de María padres: Anselmo Vásquez, Sebastián Sandoval, Juan Olivares y Víctor Villegas.

Luego fue enviado a Coyhaique donde pasó  a atender el Liceo San Felipe Benicio como asesor pastoral y por muchos años, como Rector del mismo, sin olvidar su trabajo pastoral en la parroquia y capillas que tenía la Orden en Coyhaique.  

Ocupó el cargo de Vicario  Provincial de Chile y Bolivia. Y posteriormente volvió a la formación como maestro de muchos jóvenes que se formaban para el sacerdocio entre ellos, Monseñor Luis Infante, actual obispo de Aysén. Monseñor Juan Agurto, actual obispo de Ancud, Padre Demetrio de la Torre, P. Aldo Quelín. P. Nicolás Moraga, P. Marcelo Henríquez, actual Provincial, P. Omar Arriagada, entre otros. 

Su cariño por los jóvenes lo llevó a aceptar el cargo de Representante legal de la Fundación Educacional “Santa Teresita”, hoy Fundación Educacional Santa María de los Andes, por muchos años, alternando con Padre

Faustino Gazziero y reemplazándolo después de su muerte cruenta en el 2004. 

Fue asesor de muchos grupos apostólicos en Coyhaique, Santa Bernardita y Santa Teresita, en esta última parroquia atendió hasta su muerte al grupo de Retiro de Conversión, donde muchas personas encontraron alivio a sus problemas espirituales que les aquejaban. Compartió con matrimonios la preparación a la catequesis por muchos años.

Trabajó a cargo de la formación a la vida religiosa hasta el 2010 y desde ese tiempo fue miembro clave en el directorio de la Fundación Educacional Santa María de los Andes donde ejerció hasta este año. Su cariño por los niños jóvenes y adultos era increíble por la fuerza de su acogida.

Vivió en Chile por espacio de 65 años. Sentía un cariño muy grande por la patria que lo acogió como misionero Siervo de María. 

El recién pasado 28 de agosto, día en que la Iglesia celebró la fiesta de San Agustín, doctor de la Iglesia y Legislador de la Orden Siervos de María, a raíz de un Edema Pulmonar que le produjo un paro cardio respiratorio, fue  llamado por el Padre Bueno y Dios de la vida habiendo cumplido 66 años de profesión solemne y 64 años de sacerdocio, estando ya con su familia y hermanos frailes en Vicenza, al lado del Santuario de Monte Berico.

Sus últimas palabras en Chile fueron de agradecimiento a todos los fieles de la Parroquia Santa Teresita y la bendición a todos ellos en la misa de despedida de Chile, realizada el día 20 de Agosto de 2017.